Así enfrentan residentes de dos edificios de NYCHA un futuro plan de privatización
Un conjunto de viviendas administrado como vivienda pública en Manhattan está en camino a ser transferido a administración privada, lo que tiene a los vecinos temerosos de aumentos de rentas o incluso desalojos
MANHATTAN — Hace unas semanas, los residentes de Seward Park Extension, un conjunto de dos edificios de viviendas asequibles localizadas en el Lower East Side, recibieron en su correspondencia un sobre difícil de ignorar.
A las 360 unidades les llegó una carta de la Autoridad de la Vivienda de la Ciudad de Nueva York (NYCHA, por sus siglas en inglés) donde se les informaba que su edificio pasará a manos de un programa que utiliza compañías y fondos privados para el manejo de las residencias y sus reparaciones.
La Autoridad de Vivienda dice que bajo el nuevo sistema se agilizarán las reparaciones en el edificio, pero los residentes temen que subirán las rentas o que incluso serán desalojados.
“No hubo un voto”, dijo un residente que prefiere no ser identificado por miedo a ser desalojado del apartamento donde ha vivido por más de cinco años.
La carta explica que NYCHA trasladará Seward Park Extension al programa conocido como Pacto para Preservar Juntos la Asequibilidad Permanente (PACT, por sus siglas en inglés).
NYCHA presenta a PACT como una herramienta para obtener fondos de compañías privadas destinados a reparar décadas de descuido de viviendas públicas por falta de fondos federales.
Bajo PACT, Seward Park Extension y sus 796 residentes serán parte del programa de financiación federal RAD (Estrategia de asistencia para el alquiler) lo que implica una transición del programa de viviendas públicas tradicionales o de Sección 9 (auxiliados con fondos federales) a apartamentos en el programa de Vales de Elección de Vivienda o de Sección 8 (programa con fondos privados para la administración y los reparos).
Pero otros residentes de Seward Park Extension que hablaron con este medio dicen que al hacer su propia investigación sobre otras residencias de NYCHA que se convirtieron al programa PACT, encontraron que esas viviendas caían en una “zona gris” donde ni NYCHA ni la entidad privada lidiaban con las quejas, reclamos o ayudas sobre las viviendas.
“Entre más investigaba, más me daba cuenta de lo malo que es [PACT]”, dijo Christopher Parker, residente desde 1984 de Seward Park Extension, quien ha estado recolectando firmas junto con otros residentes y con el concejal Christopher Marte para solicitar que se detenga la implementación de PACT antes que la conversión sea “oficial” y que, según Parker, se empiece a desalojar residentes.
Desde que NYCHA inició la implementación de PACT en el 2016, se han presentado múltiples denuncias de incumplimientos y vulneraciones a residentes de viviendas que pasaron a ser administradas por compañías privadas.
PACT en la práctica
Un estudio a cargo de Human Rights Watch sobre la implementación de PACT en la ciudad de Nueva York revela que, aunque llegar a una conclusión sobre los efectos de esta privatización a largo plazo resulta difícil por tratarse de un programa relativamente nuevo, sí se ha presentado un incremento en desalojos en dos de las residencias que ya están bajo el sistema PACT y que ese sistema “no ha establecido medidas de supervisión ni protecciones adecuadas para los derechos de los residentes”.
Los inquilinos de las viviendas de NYCHA—donde predominan las comunidades hispana, afrodescendiente, adultos mayores y personas con discapacidad—se enfrentan a una privatización por 99 años que “le otorga a entidades impulsadas por las ganancias un control sin precedentes sobre residentes de viviendas públicas”, según Human Rights Watch. Esto acarrearía prácticas nuevas para comunidades vulnerables de ingresos cuando llegue el momento de firmar nuevos acuerdos de rentas, recolectar rentas y elevar reclamos y otras vías legales para la protección de sus derechos.
James Rodríguez, profesor asociado de estudios urbanos de CUNY School of Labor and Urban Studies y activista del grupo The Residents to Preserve Public Housing, dice que a los procesos de privatización de PACT les falta claridad y que “han sido deficientes incentivando la toma de decisiones colectivas” lo que puede generar confusión y desconfianza entre los inquilinos.
Rodríguez sostiene que PACT no ha cumplido su objetivo de mejorar las condiciones de las viviendas en las comunidades donde ya está implementado este programa y donde abundan “reparaciones mediocres que empiezan a caerse en cuestión de meses, problemas crónicos como plomo y moho sin haber sido manejados adecuadamente, problemas por falta de transparencia y comunicación entre residentes y la administración”.
Diferentes grupos conformados por residentes y activistas han levantado críticas por la privatización de residencias de NYCHA por PACT y su meta de transferir 62,000 residencias a sección 8.Pese a esto, algunos residentes de Seward Park Extension que hablaron con este medio ven al programa como una esperanza para terminar con los años de abandono que los inquilinos dicen haber recibido de parte de NYCHA.
Deborah Givers, residente y presidenta de la Asociación de Inquilinos de estas residencias desde 2020, está a favor de que el edificio donde vive sea una de las 30,000 unidades residenciales que se transfieran a PACT.
Givers se refirió al edificio como un lugar “inseguro y desagradable” donde, según ella, varios residentes de la tercera edad tienen miedo a salir por la constante presencia de adolescentes y personas sin hogar que entran y salen libremente aprovechando la falta de un seguro en la puerta de acceso.
La inseguridad dentro de la misma propiedad a falta de un seguro en la puerta de acceso es una situación que preocupa a otros residentes porque según relatan, los pasillos y ascensores de su edificio son escenarios públicos de consumo de drogas, relaciones sexuales, gente sin hogar durmiendo y hasta de heces humanas.
Hasta octubre de 2022 en Sewad Park Extension se han registrado 158,000 órdenes de reparaciones pendientes a NYCHA. Un promedio de 90,000 órdenes es la carga de trabajo manejable para las reparaciones en viviendas NYCHA, según un informe de auditoría sobre las prácticas de mantenimiento de esta entidad. Actualmente, NYCHA registra en toda la ciudad un acopio de 668,640 órdenes abiertas.
Al preguntarle sobre la incertidumbre de los residentes a ser desalojados una vez PACT tome las riendas de la administración, Givers afirmó que “[las personas que dicen que van a ser desalojadas] están suponiéndolo”. Desde septiembre, explica Givers, NYCHA ha realizado reuniones en torno a PACT. “[Los inquilinos de Seward Park Extension} no escuchan”, opina Givers sobre la incertidumbre que el traslado ha generado entre los residentes.
Funcionarios de NYCHA contactados por este medio confirmaron que Seward Park Extension está en proceso de ser parte de PACT pero que la transición a una administración privada por 99 años no se iniciará sino hasta el 2024. Estos funcionarios explicaron que en estos próximos meses se continuarán realizando reuniones para responder inquietudes de los residentes sobre PACT.
Por medio del comité de revisión de residentes (RRC, por sus siglas en inglés) un empleado de NYCHA afirma que los residentes podrán revisar y entrevistar a los proponentes del mantenimiento de las fachadas y que tendrán a su disposición asistencia legal proporcionada por NYCHA.
Estos empleados también explicaron que la desconfianza que han manifestado algunos inquilinos de Seward Park Extension ante un posible desalojo de sus viviendas, una vez estén en manos de una administración privada, es un malentendido.
Los funcionarios afirmaron que la implementación de PACT no busca desalojar a los inquilinos y que hay estrategias para que los inquilinos que no puedan pagar sus rentas puedan tener una reevaluación de sus casos para que la renta no exceda del 30% de sus ingresos
Mientras PACT continúa su camino para asentarse en Seward Park Extension en el 2024, residentes piden que el proceso de privatización sea claro para todos. “La información [sobre PACT] necesita ser concreta como ‘Esto es lo que es, decidan que van a hacer’ ”, afirmó Janine Rivera, inquilina de estas residencias.